DESPRENDIMIENTO DE RETINA
Es cuando la retina se separa de la pared del ojo. Puede ser el resultado de una ruptura o desgarro en la retina por degeneración o tracción, y permite que el líquido de la cavidad del ojo entre al espacio subrretiniano. La separación resultante entre la retina de la pared del ojo, no permite al ojo nutrirse adecuadamente, y provoca un daño. A mayor tiempo transcurrido entre el desprendimiento y la reparación, mayor será el daño visual. Por eso, como dijimos antes, esta patología se considera una verdadera urgencia en oftalmología.
El desprendimiento de retina es una condición que puede presentarse en cualquier persona a cualquier edad; no obstante, es más común en personas miopes (debido a que los ojos de los miopes son más alargados hacia atrás y la retina debe de estirarse, y esto la debilita). De igual forma, es posible que se presente después de un golpe o traumatismo en el ojo o la cabeza, así como después de algunas cirugías. Además, se puede presentar de forma espontánea después de un desprendimiento de vítreo, ya que el vítreo de algunas personas tiene gran adherencia a la retina, y al separarse es posible que se genere tracción y ruptura.
¿Cuáles son los síntomas?
¿Que síntomas puedo presentar si estoy desarrollando un desprendimiento de retina?
Al inició, cuando el vítreo intenta separarse de la retina y la adhesión es fuerte, es posible que vea luces o flashazos dentro del ojo, sobre todo en la oscuridad. También se pueden ver manchas como “moscas flotantes” en el campo visual (más visibles frente a la luz o pantallas). Cuando ya existe mucho líquido acumulado debajo de la retina, es posible que se perciba como una cortina opaca que baja en el campo visual o como un nivel opaco que sube en el campo visual.
Cuando esta cortina o nivel involucra el centro visual, la capacidad visual disminuirá significativamente y a partir de ahí se contará desde horas hasta algunos días para una cirugía que permita recuperar la visión. Si la consulta con el oftalmólogo no se realiza a la brevedad, la pérdida visual puede ser irreversible.
¿Cómo se trata el desprendimiento de retina?
Cuando el desprendimiento esta iniciando e involucra poco espacio, es posible tratar con fotocoagulación láser, sin necesidad de hospitalización. Por el contrario, si el desprendimiento se encuentra más avanzado es posible tratar inyectando gas en la cavidad del ojo y usando láser (pneumorretinopexia); también es posible recurrir a la cirugía externa (retinopexia con cerclaje escleral) o a la microcirugía interna (vitrectomía). Con base en lo avanzado del desprendimiento y de sus características es posible proponer una u otra técnica, o la combinación de técnicas.
La prevención es la alternativa para evitar un desprendimiento, y ésta se logra acudiendo a una revisión oftalmológica una vez al año, durante toda la vida. En caso de una caída o golpe fuerte en la cabeza o en el ojo, acuda al oftalmólogo antes de presentar alguna molestia. De igual forma, si tiene usted antecedentes de miopía, de cirugía ocular, así como antecedentes hereditarios de desprendimiento de retina o de distrofias vitreorretinianas, acuda a un oftalmólogo con alta especialidad en retina para revisiones anuales o bianuales.
